A continuació es reprodueix una carta escrita des de la Comissió de l’Escola Inclusiva i que va ser publicada a La Vanguardia el passat 17 d’octubre de 2012.
Soy una madre con dos hijas escolarizadas en una escuela pública del Districte de Sant Martí.
Una de ellas fue diagnosticada hace 3 años y medio de Trastorno del Espectro Autista.
Desde que empezó la escuela, docentes-vetlladoras y el equipo de soporte a los niños con necesidades educativas especiales han conseguido importantísimos avances de mi hija.
Todo ellos gracias al esfuerzo de todos y ala Inclusión.
Ahora sufro como madre por todos estos avances que ahora se pueden ver truncados debido a la política de recortes del Departament d’Ensenyament y del Consorci d’Educació.
No podemos decirle a nuestra hija que deje de ser autista 4 horas al día o 3 días a la semana por que a la escuela le han recortado las horas de soporte.
La escuela inclusiva tiene el objetivo de avanzar en la escolarización de los alumnos con discapacidad en centros ordinarios para que estos se puedan desenvolver al máximo mediante la relación diaria con sus compañeros y compañeras.
Me siento indignada, enfadada e impotente viendo la gestión dela Consellera Rigauque pretende acabar con todos los avances positivos que mi hija ha logrado en estos 3 últimos años.
La DISCAPACIDADde mi hija NO SE RECORTA.
Victoria Eugenia Giraldo Jiménez
PDF Carta a la prensa
